Job 3
Reina Valera (RV1909) (RV1909)
1 DESPUÉS de esto abrió Job su boca, y maldijo su día.
2 Y exclamó Job, y dijo:
3 Perezca el día en que yo nací, y la noche que se dijo: Varón es concebido.
4 Sea aquel día sombrío, y Dios no cuide de él desde arriba, ni claridad sobre él resplandezca.
5 Aféenlo tinieblas y sombra de muerte; repose sobre él nublado, que lo haga horrible como caliginoso día.
6 Ocupe la oscuridad aquella noche; no sea contada entre los días del año, ni venga en el número de los meses.
7 ¡Oh si fuere aquella noche solitaria, que no viniera canción alguna en ella!
8 Maldíganla los que maldicen al día, los que se aprestan para levantar su llanto.
9 Oscurézcanse las estrellas de su alba; espere la luz, y no venga, ni vea los párpados de la mañana:
10 Por cuanto no cerró las puertas del vientre donde yo estaba, ni escondió de mis ojos la miseria.
11 ¿Por qué no morí yo desde la matriz, o fuí traspasado en saliendo del vientre?
12 ¿Por qué me previnieron las rodillas? ¿y para qué las tetas que mamase?
13 Pues que ahora yaciera yo, y reposara; durmiera, y entonces tuviera reposo,
14 Con los reyes y con los consejeros de la tierra, que edifican para sí los desiertos;
15 O con los príncipes que poseían el oro, que henchían sus casas de plata.
16 O ¿por qué no fuí escondido como aborto, como los pequeñitos que nunca vieron luz?
17 Allí los impíos dejan el perturbar, y allí descansan los de cansadas fuerzas.
18 Allí asimismo reposan los cautivos; no oyen la voz del exactor.
19 Allí están el chico y el grande; y el siervo libre de su señor.
20 ¿Por qué se da luz al trabajado, y vida á los de ánimo en amargura,
21 Que esperan la muerte, y ella no llega, aunque la buscan más que tesoros;
22 Que se alegran sobremanera, y se gozan, cuando hallan el sepulcro?
23 ¿[Por qué] al hombre que no sabe por donde vaya, y al cual Dios ha encerrado?
24 Pues antes que mi pan viene mi suspiro; y mis gemidos corren como aguas.
25 Porque el temor que me espantaba me ha venido, y hame acontecido lo que temía.
26 No he tenido paz, no me aseguré, ni me estuve reposado; vínome no obstante turbación.